Septiembre 01, Dios escogió de antemano

 

En amor, mi Padre me ha predestinado para ser adoptado como Su hijo o hija.

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo, según nos escogió en Él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de Él. (Efesios 1:3-4)

 

Dios nos conocía de antemano, y, en base a Su conocimiento previo, Él nos eligió. No está allí porque usted hizo la elección; usted está donde está y es quien es porque Dios ha elegido. Esa verdad hace una gran diferencia en su actitud hacia usted mismo y su situación, las cuales, ambas, fueron iniciadas por Dios. Usted no puso su vida en movimiento; Dios lo hizo.

No solo Dios nos conocía de antemano, sino que además nos predestinó. Algunas personas tienen miedo a la palabra predestinación y lo que esta implica. Quiero sugerir el significado de esta palabra: es que Dios organizó, por adelantado, los caminos que nuestras vidas seguirían. Como Pablo declaró en Romanos 8:29, "Porque a los que antes conoció, también los predestinó". Él lo arregló todo por adelantado.

Luego, en Efesios 1:11, Pablo escribió, "En Él (en Cristo) asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de Su voluntad".

Esta verdad debería darle seguridad. Usted ha sido predestinado; el curso de su vida ha sido organizado de antemano por quien acomoda todas las cosas según Sus planes. Él arregla todas las cosas de acuerdo con el consejo de Su propia voluntad.

 

Gracias Padre, porque soy Tu hijo. Proclamo que el curso de mi vida ha sido organizado de antemano por quien acomoda todo de la manera que Él quiere. En amor, mi Padre me ha predestinado para ser adoptado como Su hijo o hija. Amén.